'Animales de Compañía', la mentira de unos amigos que llega hasta las tablas del Teatro Principal

Cuatro amigos que se conocen desde hace tiempo se reúnen para ofrecer una cena sorpresa de bienvenida a una de ellas, con motivo de la recuperación de su reciente enfermedad. Así comienza “Animales de Compañía", una obra que transcurre en una noche, en una cena en la que la mentira se escapa de las manos y donde todos los presentes juegan a ser quienes no son. Una “incómoda” cena que aterriza desde hoy y hasta el domingo en el Teatro Principal donde todo tipo de público está invitado a asistir a esta velada de 90 minutos.

Animales de Compañía es la mentira de un grupo que decide simular una realidad inexistente para poder proteger a uno de los presentes. La necesidad de inventar historias para esconder las propias inseguridades y crear una ficción donde cada uno puede convertirse en mejor persona. A lo largo de la velada van saliendo los trapos sucios de todos ellos y aquel grupo de amigos, aparentemente perfecto y agradable, saca lo pero, de cada uno como individuos y como colectivo, poniendo en duda el valor de la amistad y la sinceridad, colisionando los egos y las envidias de cada uno.

La obra transcurre en una misma noche, durante la cena. Es una obra coral de cuatro amigos que se conocen desde hace tiempo y se reúnen para celebrar una cena de bienvenida. Belén, la otra componente del grupo, ha estado ingresada en un psiquiátrico y su ex pareja ha decidido cortar la elación que mantenía con la chica a causa de su inestabilidad y se ha marchado a vivir a Australia con una nueva pareja. Esa información la tienen todos los amigos excepto la misma afectada, Belén, que quedó inconsciente tras tomarse un bote entero de pastillas en un intento de suicidio para llamar la atención y, en principio, no sabe que se ha quedado soltera.

Es un texto que funciona como un reloj suizo, con una tensión dramática medida y efectiva que convierte la puesta en escena en todo un gozo teatral para el espectador. Tal y como reconoce su autora, “la soledad y la necesidad de afecto nos convierte en Animales de Compañía, pero por culpa de la soledad no podemos olvidar que la mente nunca tiene futuro.

La creación de este texto surge a la usanza del teatro independiente catalán, donde un grupo de actores jóvenes ensayan en la creación de un espectáculo mediante emociones hasta que la dramaturga Estel Solé fijó el texto a partir de los ensayos realizados. Es por tanto la primera pieza teatral de la actriz, dramaturga, directora y presentadora de televisión, formada en el ámbito de las humanidades y con una amplia experiencia en el sector cultural.

Fue estrenada en más de 60 domicilios particulares a modo de teatro de salón, ante la constante negativa de ser presentada en salas de pequeño formato en Barcelona. Finalmente logró ser estrenada en la ciudad condal con éxito durante más de cuatro meses.