El Real Zaragoza cae de la forma más dolorosa (1-0)

No hay juego, no hay ideas, no hay ni disparos a puerta. Solo la desazón de otra derrota tras un partido en el que el Real Zaragoza no mereció puntuar. El Racing ganó 1-0 pero aún pudo ser un resultado más abultado. Ni jugar con diez (por doble amarilla a Simeone) toda la segunda parte puede servir como excusa: con Giuliano tampoco se disparó entre los tres palos. La derrota en sí es dolorosa, pero es que en la forma se trató de una tragedia: fue gracias a un gol de cabeza de Pombo a la salida de un córner. Es la historia de un equipo plano y un entrenador, Juan Carlos Carcedo, en la cuerda floja. 

En el inicio, solo la brega de Simeone y la presencia de Azón provocaban ligeras esperanzas arriba. Por atrás, antes del minuto 11 Cristian Álvarez ya había salvado a los suyos con una buena parada tirando de intuición. El Racing, por su parte, intentaba jugar alegre, con un Pombo inspirado y motivado -muy buena primera parte del zaragozano- en la mediapunta. Dos tarjetas a Pombo y Giuliano por sendas entradas recias mostraron la intensidad con que habían salido ambos equipos, que sin embargo flaqueaban en cuanto a ideas. El juego blanquillo se basaba en pelotazos arriba en busca de las correrías de Mollejo, Azón o Simeone... y eso que sacaban el balón jugado desde atrás, pero los centrocampistas -obtusos Grau, Francho y Manu Molina- eran incapaces de conectar con los delanteros. Las imprecisiones eran la tónica del partido. En el minuto 25 Cristian volvió a salvar a los suyos con una buena parada a cabezazo de Alves. El Real Zaragoza dominaba la posesión de manera superflua, mientras que el Racing era superior a los puntos. El drama llegó al filo del descanso, cuando Simeone pecó de exceso de intensidad y le pisó a un rival en la disputa de balón: doble amarilla y expulsión del campo mientras sus compañeros se echaban las manos a la cabeza y Carcedo se sentaba en el banquillo con la mirada perdida. Había que mostrar mucho más de lo ofrecido en la primera mitad (no se tiró a puerta), y con uno menos. 

Resonancias funestas al volver del descanso con dos milagros de Cristian y un poste en los primeros seis minutos: Jair despejó sobre la portería de un Cristian Álvarez que tuvo que volar; cuatro minutos después, el rosarino salvó un remate a bocajarro de Matheus. En la siguiente acción, el Racing reventó el palo izquierdo del arquero. Era una locura que aún no se fuera perdiendo. Los aragoneses intentaban realentizar el juego y Vada entró por Mollejo para ponerle más pausa. En el minuto 66 siguió el festival de Cristian: una mano a frentazo de Tienza fue celebrado como un gol y con los abrazos de sus compañeros: Grau y Jair corrieron a felicitarle. No pudo hacer nada sin embargo cuando Pombo se impuso a Zapater y a Gueye a la salida de un córner para cabecear limpiamente a gol. Tenía que ser justamente el canterano, que no lo celebró pese a que hacía casi un año que no anotaba. Un gesto de respeto hacia su exequipo en un momento muy complicado para los de Carcedo, al que los valientes desplazados le volvieron a gritar desde la grada que se marchara.

Faltaba poco más de un cuarto de hora para reaccionar, pero el equipo estaba muerto. Cristian salvó a los suyos del 2-0, Pombo casi marca otro golazo y el Racing se gustaba ante una afición de pie que ovacionó a Pombo. Por parte del Zaragoza, alguna tímida llegada al área sin marcar. Lo peor fue que murió sin apenas hacerle frente a un Racing que no sufrió. Los guantes de Parera acabaron intactos. Fue la segunda punzada de dolor tras el gol de Pombo: la de un equipo que va perdiendo y no sabe asustar a un rival que ocupaba descenso. 

Ficha técnica: 

Racing de Santander: Parera; Fernández (Nuñez 69'), Pol Moreno, Alves, Satrústegui (Saúl 69'); Tienza, Íñigo (Camús 79'), Pombo (Fernández 95'); Mboula, Vicente y Matheus (Jabbari 95').

Real Zaragoza: Cristian; Fran Gámez (Larra 78'), Lluís López, Jair, Gabi; Manu Molina (Puche 79'), Jaume, Francho (Zapater 68'); Mollejo (Vada 54'), Giuliano Simeone e Iván Azón (Gueye 68')

Árbitro: Busquets Ferrer. Amonestó a Pombo, Tienza, Cristian, Manu Molina, Gerard Fernández, Grau. Expulsó a Simeone con doble amarilla. 

Goles: 1-0, Jorge Pombo (72')