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El Real Zaragoza resucita al Málaga y se mete en un lío (3-0)

El conjunto aragonés perdonó en la primera mitad y se desvaneció en la segunda ante el empuje de un Rubén Castro pletórico

Manu González /
Vada en un lance del partido. Foto: LaLiga
icono foto Vada en un lance del partido. Foto: LaLiga

El Real Zaragoza naufragó en Málaga en un partido para olvidar. 3-0 ante un equipo que llevaba 7 encuentros sin ganar y síntomas preocupantes en un momento clave de la temporada, cuando no hay que temblar. Y eso es lo que hizo en la primera mitad, cuando perdonó a un Málaga que estaba en situación crítica: ante un rival desmayado, Simeone y Vada fallaron dos ocasiones clarísimas que pudieron haber hundido al Málaga. Con el 0-0 y la ligereza de no tener nada que perder, los malagueños volaron a lomos de un Rubén Castro que anotó la primera que tuvo: a partir de ahí el equipo aragonés entró en colapso. 3-0 que puede interpretarse como un resultado engañoso (la primera parte no fue nada mala) pero las carencias están ahí. El descenso está a cuatro puntos, el Málaga se les pone a ocho y hay que reaccionar ya.

El tanteo inicial duró cuatro minutos. Primero el pivote local Genaro asustó en dos ocasiones a la zaga; al instante, la respuesta zaragocista: dos conducciones de Bebé por la izquierda que terminaron una con un disparo manso de Vada sin problemas para Yáñez y la segunda con un centro chut que palmeó el arquero. Asustaba el lisboeta con sus juegos malabares en la banda de Delmás. Respondió el exzaragocista filtrando un gran pase a Villalba, cuyo tiro dentro del área taponó Jair de forma providencial. El fútbol se desarrollaba sin apenas interrupciones, de forma fluida y limpia pero sin ocasiones. El Málaga volcaba sus ataques por la banda de Lago Junior y Delmás y conseguía con éxito desactivar la salida de balón zaragozana. Por su parte los de Escribá salían rápido de la mano de Simeone, única referencia arriba, y Bebé. En el minuto 35 el portugués recogió un envío de Alarcón, se fue con facilidad de Delmás y su pase al área lo mando Bermejo a las nubes. Empezó a tocar con paciencia el equipo aragonés, jugando con las urgencias del Málaga, bien colocado en el campo con el mono de trabajo.

Dos envíos a la carrera de Simeone que despejó el portero saliendo del área fueron el aperitivo de los dos golpes más claros del partido: primero, un mal pase hacia atrás de un defensa rival que aprovechó Simeone para regatear a Yáñez pero, con todo a su favor, perdió unos segundos preciosos en acomodársela a la diestra y ver como Ramalho le segaba el balón; segundo, un latigazo de Bebé tras un córner que despejó el portero malaguista y, en el rechace, se pidió un penalti a Vada que perfectamente pudo ser. Se marchaba el Zaragoza a los vestuarios consciente de que había perdonado al desvaído Málaga, que apenas les había atacado. 

En el descanso Pellicer quitó al errático N´Diaye para que entrara un Rubén Castro que iba a marcar el guion del partido... se regresó al campo con el Real Zaragoza llevando el mismo guion, muy ordenado, con un Bebé muy pegado a la banda izquierda que pintaba con trazos gruesos las imágenes más ofensivas de su equipo. Pero el gol lo protagonizó un ex: Delmás. El de Monegrillo se fue de Nieto con facilidad, descargó con calidad para Villalba y este encontró a un Rubén Castro que penetró con facilidad entre la zaga para definir ante Cristian. Un derechazo de Bebé que se marchó fuera por centímetros fue la reacción del equipo, consciente de que el Málaga había resucitado sin saber cómo. Escribá metió un doble cambio en el minuto 64, Puche y Gámez  por Bermejo y Larra, es decir: profundidad para la banda derecha. 

No le dio tiempo ni de apostar por un fútbol más directo a los blanquillos: y es que en el minuto 75 Lago Junior atrapó un balón en la frontal, se acomodó ante Francho y soltó un latigazo inapelable que tocó en el palo y se metió dentro. Un auténtico golazo y una calidad que nunca se intuyó en su paso por el Huesca. Con dos goles en contra Pau Sans volvió a tener minutos: sangre joven en mitad -otra vez- de la tormenta. Gueye también tuvo sus minutos pero, como a modo de broma macabra, Rubén Castro se fue de Jair para definir ante Cristian con una preciosa vaselina. No hubo tiempo para más: la grada entonó el "sí se puede" y lo jugadores se marcharon camino del autobús conscientes de que se han metido en un lío muy grueso.

Ficha técnica: 

Málaga CF: Rubén Yáñez; Delmás, Ramalho, Juande, Cristian (Jiménez 77'); N'Diaye (Rubén Castro 46'), Genaro; Febas, Villalba (Escassi 65'), Lago Junior (Appiah 87'); y Fran Sol (Gallar 65')

Real Zaragoza: Cristian; Larra (Gámez 63'), Lluis López, Jair, Nieto; Francho, Alarcón (Molina 77'), Bermejo (Puche 63'), Bebé; Vada (Pau Sans 74') y Simeone (Gueye 81')

Árbitro: Gorostegi Fernández (vasco): amonestó a Larra y Simeone

Gol: 1-0, Rubén Castro (56'). 2-0 Lago Junior (75'). 3-0 Rubén Castro (84')

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