Jorge D'Alessandro: "No tengo ninguna duda de Simanic volverá a jugar; un riñón no es impedimento"

Boriša Simanić, jugador de Casademont Zaragoza que acaba de perder un riñón tras recibir un codazo ante Sudán del Sur en el Mundial de Baloncesto, tiene un testimonio muy especial que invita al optimismo. Jorge D'Alessandro, exportero del Salamanca, recibió un golpe en San Mamés el 1 de enero de 1978 tras atrapar un balón. El futbolista pudo acabar el partido pero lo pasó fatal: "Llovía torrencialmente en San Mamés y en un córner salí a blocar la pelota en el punto de penalti. Entonces sentí un 'plac', un impacto tremendo. Seguí jugando pero no podía retener la orina, orinaba sangre", rememora el exfutbolista, que también fue entrenador de la SD Huesca en la temporada 2012-2013. Con las horas, todo se complicó: "El problema era que tenía tan encharcada la parte abdominal que no detectaban qué tenía. Al abrirme vieron que tenía un riñón partido en dos; me lo tuvieron que extirpar y a partir de ahí empezó mi lucha".

A partir de ahí, D'Alessandro se encontró en la misma situación que Simanic y un solo pensamiento: "A partir de ahí, comenzaba mi lucha", explica. De pasar a "un estado de muerte en la UCI", a preguntar que cuándo volvería a jugar. "Mentalmente estaba preparado para jugar, jamás pensé que fuera a ser determinante perder un riñón". 

El argentino explica cómo fue su lucha: tanto mental como de intenso trabajo de fortalecimiento abdominal y muscular. "En esos años una persona sin riñón era considerada una invalida, pero comenzó mi preparación, con levantamiento de pesas. Vieron que no era necesario el trasplante y volví a jugar con un riñón". Así, logró reaparecer un 23 de abril de 1978, poco más de 4 meses después, en un partido ante precisamente ante el Athletic. Lo hizo al 70%, aún no se sentía bien 

Mensaje para Simanic

"Limpieza mental. Ya no fortaleza mental, sino borrarse los malos pensamientos. Pensar en positivo y en el futuro. Tiene que manejar el músculo invisible más importante del ser humano, la voluntad": ese el mensaje principal para el jugador de Casademont. D'Alessandro afirma que para él el riñón se convirtió en una especie de "tercera persona", hablaba de él como si no fuera un problema: de hecho volvió a jugar y a entrenar con total normalidad y no se retiró hasta pasados casi diez años. 

"No tengo dudas de que volverá a jugar, las claves serán la protección, un buen blindaje y saltar al campo. Que salga a por todas, el riñón no será un problema", afirma sin ambages un D'Alessandro que a sus 74 años no ha vuelto a tener ninguna incidencia relacionada con aquel accidente un ya lejano 1 de enero de 1978, más allá de algunas revisiones médicas rutinarias cada pocos meses.