Óscar Fle: "No hay descensos porque en esta situación no podemos penalizar a los clubes"

Poco a poco el fútbol base y regional va recuperando equipos y categorías tras su vuelta a la competición el pasado fin de semana. Un retorno gracias al esfuerzo de todos. El pasado fin de semana, el último de febrero, arrancaron por fin la Regional Preferente y la Juvenil Preferente, entre otras. Paulatinamente se irán poniendo en funcionamiento el resto de categorías del árbol que es el fútbol federado y formativo, en algunos casos con ligas de cuatro equipos. Ligas como la Primera Femenina (cuarto escalón del fútbol femenino), la Primera, la Segunda y la Tercera Regional o la Primera Juvenil arrancaran a la largo de la primera quincena de marzo. Algo conseguido con el esfuerzo de todos, como afirmó Óscar Fle en el programa de 'Nuestra Jornada', de Aragón Deporte: "Tenemos que ser muy respetuosos con la normativa que establezcan las autoridades sanitarias. En ese sentido nosotros hemos puestos a su disposición toda nuestra colaboración para que así sea, tanto dentro como fuera del terreno de juego", expuso.

El presidente de la Federación Aragonesa de Fútbol argumentó que haya ascensos de categoría pero no descenso. Afirma que no quieren que haya castigos deportivos y sí premios. Todas las ligas estarán muy reducidas, y faltan clubes que por precaución han decidido no estar. Para los participantes habrá ascensos pero no descensos. Un sistema de premios deportivos sin castigo, marcado por la pandemia. Así lo argumentó: "Lo hemos considerado así puesto que hay circunstancias que muchas veces a un equipo concreto le va a impedir jugar no por razones propias, sino ajenas. Por ejemplo, léase el tema de un ayuntamiento que decida, porque al final son los dueños de la instalación, que no se puede jugar lo que sea... no se puede penalizar al club".

Reelegido en la pasada Asamblea General Extraordinaria de la Federación Aragonesa de Fútbol como presidente para 2024, hay un reto que ocupa a Fle: superar el impacto de la pandemia en un fútbol que quiere recuperar una normalidad que, afirma Fle, tardará más de un año en llegar.