Publicidad

Un excelso Bell-Haynes no basta para doblegar al Joventut (95-84)

Casademont Zaragoza, afectado por las bajas, no pudo llevarse el partido en el pabellón de la Penya pese a luchar hasta el final

Aragón Deporte /
Trae Bell-Haynes, el mejor del partido de Casademont Zaragoza. Foto: Liga ACB
icono foto Trae Bell-Haynes, el mejor del partido de Casademont Zaragoza. Foto: Liga ACB

No pudo ser. El cansancio y las bajas se impusieron a las ganas que demostró un Casademont Zaragoza combativo hasta el final. 95-84 perdió ante el Joventut Badalona pese a un Bell-Haynes que estuvo excelso. El canadiense dio otra lección de baloncesto y presentó unos números apabullantes (25 puntos, 26 de valoración). Apretando atrás en los peores momentos y con el acierto de los McFadden, Gielo (buena valoración y 13 puntos) Sulejmanovic y el propio Bell-Haynes, el equipo rojillo tuvo sus luces en una noche en que no se les puede reprochar nada.

El partido arrancó frenético por parte de los dos equipos. En los primeros minutos con dos protagonistas: Feliz y Yusta, que empezaron anotando de 3; todos los puntos fueron suyos hasta el 5-6. Mientras, el equipo rojillo se iba cargando de faltas e intentando igualar el ritmo de un conjunto catalán que había salido fortísimo. El partido no podía estar más igualado... aunque a partir del minuto 6 la Penya se empezó a distanciar en el marcador. Ni Bell-Haynes, tan entonado como siempre, podía retomar el dominio en el marcador: más bien lo contrario, el Badalona se distanciaba con dos triples seguidos de Evans. Al final, 24-17 al final del primer cuarto. Un triple de Andrews para volver fue una auténtica bofetada para poner una distancia que empezaba a ser peligrosa. Ni el acierto de McFadden para anotar de 3 podía igualar los de un Andrews que estaba con la muñeca caliente. Poco a poco se iba alejando en el marcador el equipo local sin dejar que Casademont impusiera su juego. El Badalona cogía los rebotes con más facilidad, se movía mejor en la pintura... todo eso se iba traduciendo en un marcador que iba 38-26 a falta de 5 minutos para el descanso. McFadden intentaba ponerse a los mandos y el Badalona fallaba canastas fáciles, pero ni por esas. Con un 6 de 13 en acierto en el triple era difícil...

Si Casademont seguía con vida en el descanso (50-38) fue por un Bell-Haynes increíble una vez más: varias acciones suyas seguidas hicieron que Durán parara el partido. En el tercer cuarto el canadiense le fue recortando poco a poco la ventaja a la Penya, por más que arrancara el tercer cuarto con Busquets encestando sin oposición. Bell-Haynes ofrecía una exhibición de triples, lanzamientos de dos, rebotes y faltas provocadas. Poco a poco Casademont se iba metiendo en el partido, gracias también a Sulejmanovic, muy acertado en la pintura. Las claves eran la seriedad en defensiva y un juego más coral (más allá de Bell-Haynes). Con Evans recién salido del banquillo para arreglar la situación pero un Watt crecidísimo a base de rebotes seguía haciendo que Casademont acechara a los catalanes en el marcador. Un arreón final de la Penya les hizo coger aire y plantarse 67-55 en el último cuarto.

Y ahí es cuando Casademont empezó a notar de verdad la falta de efectivos. En ningún momento fueron capaces de bajar de los dos dígitos de diferencia, pese al esfuerzo. El cansancio hacia mella, y el acierto de los Feliz (17 de valoración), Andrews o Ribas, también. Un triplazo de Gielo colocó a los suyos a 8 a 2:23 del final. A partir de ahí, los de Fisac mordieron pero la renta catalana era demasiado alta... faltó más acierto pero se intentó hasta el último segundo. 

Guardado en...

Casademont Zaragoza