Eduardo Lolumo: "Las tormentas son patrimonio inmaterial nuestro"

Eduardo Lolumo, presentador de 'El Tiempo', respondió en directo a las preguntas de los usuarios en un encuentro digital llevado a cabo en el canal de streaming de Aragón Noticias.

¿Cuánto tiempo te cuesta preparar la sección y cómo lo haces?

Pues mira, yo he preparado alguna charla sobre el tema en la que digo: ‘¿Ocho horas para ocho minutos?’. Pues sí, efectivamente. Nuestro trabajo va mucho más allá de lo que se puede ver en la televisión. Lo preparamos todo nosotros, el equipo de ‘El Tiempo’, cada uno en su espacio, prepara el pronóstico, recoge los datos, dispone los mapas, seleccionamos las fotos, contestamos a la gente, buscamos el refrán, hablamos del pueblo que nos ha tocado ese día… Todo eso, además de ponernos el día, aunque parezca mentira, nos cuesta ocho horas e incluso hasta más. Es como quien actúa una en una obra de teatro, que se ha pegado meses ensayando, o el futbolista, que no solo juega el partido, sino que se ha preparado mucho antes.

¿Crees que los ‘meteorólogos campesinos’, a veces, aciertan más que vosotros?

La verdad es que la palabra ‘acertar’, aunque nos la dicen mucho cariñosamente, no me gusta mucho, porque hacemos las predicciones basadas en modelos científicos y matemáticos. Efectivamente, la gente del campo puede afinar en una predicción mucho, pero en la de su zona. A esa persona, no le pidas que haga una predicción de otra comarca. Ellos tienen los indicios de todas las nubes, montes, vientos, etc, de su zona y, allí, indudablemente, seguro que saben muchísimo, difícilmente se van a equivocar.

¿De dónde sacas tantos refranes durante tantos años?

Que conste que no me los invento porque no hay necesidad. Hay tantísimos… Yo empecé a hacer un trabajo de investigación para conocer la validez de los refranes porque pensaba: ‘¿cómo, esta persona de este pueblo, puede decir en dos frases algo tan certero sobre esa zona?' Es increíble. Fui recopilando esos refranes y la gente me manda muchísimos. Hay tal cantidad de acceso a libros que tengo muchos refranes.

¿Cuál es tu ‘plató’ favorito de Aragón?

La verdad es que me gustan mucho los exteriores y, el que más me gusta, que lo hacemos todos los años, es el de Formigal, porque nos vamos a unos encuentros con meteorólogos allí. En ese momento, hacer un directo y que esté nevando... Qué más puedes pedir. Y si, encima, tienes al lado a José Antonio Maldonado, por ejemplo, pues mejor que eso, no se puede.

¿Vamos a seguir con tantas tormentas mucho tiempo más?

No se pude asegurar. Desde luego, el cupo de tormentas de este verano ya lo hemos gastado con todas las que hemos tenido. ¡El turno de tarde aquí está siendo criminal! Cuando parece que no va a haber más tormentas, de repente, te crece una en Calatayud o en otro sitio… Somos tierra de tormentas pero, es verdad, que este año, especialmente. El cupo que decía antes, no se acaba. Va a seguir. ¿Cuándo? Esta misma noche y mañana, pero parece que luego nos dejan descansar unos días. Pero vas a otras Comunidades y no hay tormentas en verano. Es patrimonio inmaterial nuestro. Aquí vienen ‘cazadores de tormentas’ porque saben que, especialmente en Teruel, las van a tener.

¿Cómo va a ser este verano?

Las previsiones estacionales dicen que va a ser un verano algo más cálido y normal en cuanto a precipitaciones.

¿Por qué la inestabilidad en el tiempo de dolor de cabeza?

Yo era reacio a creerme estas cosas porque, lo que le pasa a una persona y a otra, puede ser muy relativo. Pero sí que hay evidencias de estudios. Hay un porcentaje de la población, cerca de un 30 por ciento, que se le considera 'meteorosensible'. Aquí, hay un estudio del Hospital Clínico del neurólogo López de Val, que vinculó la entrada a Urgencias y el agravamiento de dolencias con días de viento. Vio que sí había un aumento de la percepción del dolor, pero no de la dolencia en sí, con los cambios bruscos de presión.

Coordinas el curso de verano ‘Tiempo y clima a tu alcance’, que es del 7 a 9 de julio en Jaca. ¿En qué consiste?

Es el quinto año que lo hacemos, es un curso para todas las personas que les guste el mundo de la meteorología o que dependan de él, como personas que se dedican al campo, deportistas, periodistas o, simplemente, que tengan curiosidad por estos temas. El repertorio que utilizamos es muy amplio y sencillo, apto para todo el mundo y con grandes profesionales. Este año tenemos una novedad: cocina 'meteoclimática', que intenta evitar emitir gases que generan efecto invernadero de forma inútil comiendo de una forma sana.

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