La campaña de la trufa en Aragón desciende casi un 40%, pero su calidad es "excepcional"

La trufa es un alimento que tiene cada vez más demanda dentro del sector gastronómico, y Aragón es uno los principales productores de este hongo. Sus cultivos en la comunidad ya superan las 10.000 hectáreas, aunque el último año la producción se ha reducido "entre un 30% y un 40%. En Vera del Moncayo (Zaragoza), donde este verano los truficultores perdieron parte de sus cultivos por un incendio, celebran una feria centrada en la trufa y sus virtudes.

El pequeño hongo reúne este fin de semana en esta localidad a productores, pero sobre todo a muchos curiosos que quieren saber más sobre él y, también, cómo no, degustarlo. En los expositores de esa feria se pueden encontrar desde quesos hasta mieles hechos con trufa, y también se pueden comprar unidades enteras a un euro el gramo.

El evento llega en plena campaña de recolección, aunque este año se prevé peor que la de hace un año. "Vemos que la producción va a ser menor, pero la calidad, excepcional. Al final del año haremos valoraciones, pero yo creo que habrá alrededor de un 30% o un 40% menos de producción", indica Pedro Gil, vicepresidente de la Asociación de Truficultores de las Comarcas de Zaragoza (Truzarfa).

En el municipio de Vera del Moncayo el incendio del pasado verano afectó a la producción, aunque más lo hicieron la falta de lluvias y el calor. Aun así, son muchos los negocios en torno a este diamante negro, desde viveros hasta adiestradores caninos. "Tienen que ser unos árboles determinados que se puedan asociar con la trufa negra. Se asocia en las raíces y luego, cuando se hacen grandes y crecen, ya son capaces de producir hongos", explica Pablo Igual, gerente de Trufater.

Por su parte, la adiestradora canina Alba Herranz detalla: "El mundo del perro es un elemento fundamental para la búsqueda de trufa. Cada vez hay más gente que demanda el servicio de adiestramiento de perros."

Y no hay que olvidar que la trufa es un ingrediente preciado en la gastronomía, y su olor y sabor cuela cada vez en más cocinas, como destaca Toño Royo, propietario de Lasca Negra: "Ennoblece los platos más simples, y de eso se trata un poco, que la gente le pierda el miedo y la utilice habitualmente en todas sus casas". 

Más de 5.000 euros por el mejor ejemplar

Un manjar, aseguran todos los agentes implicados, que ahora es más asequible para el bolsillo del consumidor.  Aún así, hay ejemplares y ejemplares. La trufa más grande del Concurso de las Mejores Trufas, que se ha celebrado este domingo en el marco de la Feria de Vera de Moncayo, pesa 587 gramos y ha alcanzado los 5.100 euros en la subasta pública. Un restaurante próximo al municipio de la Comarca de Tarazona y el Moncayo, el Molino de Berola, ha sido el ganador.

Este hongo se había recogido en Anento y lo ha presentado Beatriz Lahoz Bellido. El precio de salida en la subasta era la cifra de su peso, 587. Según han indicado desde la organización del evento, "ha sido una puja reñida entre asistentes procedentes de Zaragoza, Huesca y Teruel".