La Policía Nacional detiene a 11 integrantes de dos bandas juveniles violentas en Zaragoza

La Policía Nacional ha detenido a 11 jóvenes, todos ellos integrantes de las bandas violentas rivales Dominican Don´t Play y Black Panther, acusados de cometer varias agresiones con armas blancas en los últimos meses. De ellos, cuatro han ingresado en prisión. Tienen entre 16 y 29 años. 

Las agresiones investigadas se produjeron en diferentes días y ubicaciones de la capital aragonesa. Como consecuencia de estos enfrentamientos, varios jóvenes tuvieron que ser atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Miguel Servet. Incluso un policía fuera de servicio trató de mediar en una de estas agresiones identificándose como tal y recibió una brutal paliza que le rompió los huesos de la nariz y le provocó politraumatismos por todo el cuerpo.

Agentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón detuvieron a estos 11 jóvenes, cinco de ellos menores, de entre los 16 y 29 años de edad, como presuntos responsables de varios delitos de lesiones, tentativa de homicidio, robo con violencia y atentado a agente de la autoridad.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de Homicidios del Grupo de Menores y de la Brigada Provincial de Información de Zaragoza, después de que se produjeran estos sucesos con un denominador común: la utilización de armas blancas y la participación de varios integrantes de dos conocidas bandas juveniles de carácter violento.

Cuatro agresiones en tres meses 

La primera agresión investigada se produjo el 29 de noviembre del año pasado en el barrio de Las Fuentes, cuando un joven fue acorralado por un grupo de encapuchados con estética latina. Le golpearon por todo el cuerpo e incluso le hirieron con un machete de grandes dimensiones que le provocó una herida abierta y profunda en la cabeza. La víctima tuvo que ser trasladada a la UCI del Hospital Miguel Servet donde permaneció ingresado una semana. En este momento sigue recuperándose de las secuelas.

La investigación de este suceso llevó a la detención del autor material de la agresión, un joven de 29 años que pertenece a la banda Dominican Don´t Play, que pasó a disposición judicial. Paralelamente el Grupo de Menores procedió a la detención de otros dos integrantes de la banda, en este caso menores de edad, que también habrían participado en esta agresión y que fueron entregados a sus tutores legales, tras informar de los hechos a la Fiscalía de Menores.

Otra de las agresiones investigadas se produjo el 22 de diciembre. Dos jóvenes fueron abordados por un grupo similar al descrito anteriormente, jóvenes encapuchados con estética latina, en las inmediaciones del Club Naútico. Intentaron robarles y después los agredieron, según informa la Policía, "con una violencia desmedida". Una de las víctimas sufrió un corte profundo por arma blanca en la pierna y tuvo que ser trasladada de urgencia a un centro hospitalario.  

Solo un día después, el 23 de diciembre, un joven que iba acompañado de su pareja en la calle Delicias fue sorprendido por un grupo numeroso de hombres, también encapuchados y con estética latina, que los agredieron "de forma súbita y violenta", lanzándoles botellas y propinándoles patadas y puñetazos, y utilizando armas blancas, concretamente dos cuchillos de 20 y 30 cm de longitud. 

El herido presentaba, al menos, cinco heridas de arma blanca en piernas, manos y espalda, y sufrió un neumotórax y policontusiones. La rápida intervención de los agentes del Grupo de Atención al Ciudadano fue clave para salvarle la vida y ser posteriormente trasladado a la UCI del Hospital Miguel Servet.

Estos dos últimos casos fueron perpetrados por las mismas personas, tres hombres de 23, 27 y 29 años pertenecientes a la banda Black Panther. Tenían su centro de actuación en un piso del barrio de Las Fuentes y, dada su peligrosidad, en su detención colaboraron los agentes del Grupo de Operaciones Especiales (GOES). Los detenidos pasaron a disposición del juzgado, que decretó el ingreso en prisión provisional para los tres.

La última de las agresiones incluidas en esta investigación se produjo el pasado 11 de febrero en Camino de las Torres. Dos parejas que se encontraban esperando un taxi fueron agredidas brutalmente por un grupo de unas diez personas. Igual que en los casos anteriores, iban encapuchadas y vestidos con estética latina. La agresión se focalizó en los dos hombres. Les golpearon de forma reiterada con patadas y puñetazos y quedaron inconscientes en el suelo. Ambos sufrieron lesiones graves y uno de ellos tuvo que ser operado de una importante fractura de nariz.

Un agente fuera de servicio recibió una brutal paliza

Un policía nacional que se encontraba fuera de servicio, observó esta última agresión y, al percatarse de su gravedad, no dudó en dirigirse a ellos e identificarse como agente de la autoridad. Esto no hizo que cesaran, sino todo lo contrario, arremetieron contra él propinándole una brutal patada en el rostro y fracturándole los huesos de la nariz. El resto de la banda continuó agrediéndolo hasta causarle politraumatismos por todo el cuerpo. 

En este último episodio de violencia, los agentes encargados de la investigación identificaron y detuvieron a cinco de los autores, tres de ellos menores de edad. Todos pertenecen a la banda Dominican Don´t Play y fueron puestos a disposición judicial. Los mayores de edad ingresaron en prisión y los menores fueron entregados a sus tutores legales y se puso en conocimiento de la Fiscalía de Menores. 

"No son grupos de amigos, sino organizaciones criminales"

El portavoz de la Policía Nacional en Aragón, Rubén Nido, ha destacado este lunes en el programa Despierta Aragón, de Aragón Radio, la peligrosidad de las bandas juveniles que operan en Zaragoza. "Causan casi siempre una gran alarma social, porque suelen portar armas blancas, cuchillos o machetes, y vemos que esas agresiones que efectúan son muy violentas", ha subrayado.

Según este agente, los integrantes de estas bandas suelen tener "entre 14 y 30 años", y habitualmente buscan el control territorial de la ciudad, y expandirlo. Actualmente hay, al menos, tres bandas latinas activas en la capital aragonesa: "Tenemos la Dominican Don't Play (DDP), que opera principalmente en el entorno de San José y La Granja, los Black Panther (BP), que se sitúan por el barrio de Delicias y alrededores. Y también se han detectado por el Gancho miembros de Los Trinitarios, pero tienen poca presencia".

Estos grupos criminales captan nuevos miembros entre los 14 y 18 años en los parques, colegios e institutos. "Suelen acercarse a jóvenes más vulnerables, que tienen facilidad para engancharse al grupo. Al ser grupos muy jerarquizados, con un cabecilla, encuentran en ellos un rol y un estatus, y van escalando conforme llegan nuevos miembros, pero resulta muy difícil salir de ellos, ya que serán amenazados o tendrán que hacer cosas que no quieran", ha comentado el portavoz de la Policía Nacional.

Uno de los rituales de iniciación de estas bandas es cometer un acto de violencia. "Para que un joven ingrese en estos grupos tiene que hacer un robo con violencia, con el propósito de autofinanciarse. Algo que completan con el tráfico de drogas y el menudeo", ha añadido Nido.

Finalmente, el agente ha resaltado que es "complicado" que unos padres se puedan dar cuenta de que su hijo pertenece a una de estas bandas juveniles. "Tendrían que conocer a sus amistades, o ver si están teniendo actitudes distintas a lo normal", y ha añadido: "Solemos dar charlas en colegios e institutos donde alertamos a los chavales de las consecuencias que tiene acceder a un grupo de estos. Lo más seguro es que acaben fichados por la Policía y contando con antecedentes. No son grupos de amigos, sino organizaciones criminales", ha concluido.