Publicidad
TRADICIÓN

Las alfombras de pétalos de Daroca duplican su extensión en los Corporales tras ser declaradas BIC

Esta celebración está vinculada a la aparición de sangre en seis hostias consagradas que convirtió a la localidad zaragozana en lugar de peregrinación en el siglo XIII

S.C.G. /
Procesión de los corporales de Daroca.
icono foto Procesión de los corporales de Daroca.

La procesión que celebra Daroca en honor de los Corporales recorre las calles de esta localidad para rememorar el suceso ocurrido en 1238. La tradición recoge que las formas consagradas durante la celebración de una misa quedaron empapadas en sangre, que quedó adherida a los corporales que las envolvían. En la actualidad este hecho se rememora en una procesión adornada por miles de pétalos de flores que se lanzan al paso de las formas. Parte del recorrido transita sobre las conocidas como alfombras de pétalos de Daroca, declaradas en enero Bien de Interés Cultural (BIC), y que este año duplican su extensión. 

El párroco de la basílica de Santa María de Daroca, Federico Castillo, ha subrayado que se ha trabajado para que este año "las alfombras ocupen un recorrido mayor". De las 15 que se elaboraban habitualmente, pasarán a ser 30. Un proyecto que tiene otro aliciente: "Se ha implicado la gente joven de la localidad".  

La procesión de Daroca se realiza bajo el palio, acompañada de las cruces, una custodia donada por Pedro IV y antiguos ornamentos. El recorrido se mantiene y tiene lugar el día del Corpus Christi, el jueves 60 días después del Domingo de Resurrección

Federico Castillo es el párroco de la Basílica de Santa María desde hace tres años. Explica que vive esta celebración como "un momento muy especial", que lo es más cuando le toca sacar los corporales y colocarlos en la urna. Únicamente el párroco puede sacarlos de su camarín y portarlos durante la procesión. Este año estará presidida por el Nuncio Apostólico, que es el representante del papa Francisco en España, una presencia que, para Castillo, pone de manifiesto la importancia de esta fiesta. 

Asume que los tiempos han cambiado, pero insiste en que la fiesta de los Corporales sigue siendo un momento especial para los darocenses, que lo viven "con afecto y motivación". Los corporales se exponen cada jueves del año en la "la hora santa" y también todos los domingos de verano, para facilitar la visita. El objetivo es conseguir un mayor número de visitas, pero, de momento, se reciben y se mantienen cada año. 

El suceso que convirtió Daroca en lugar de peregrinaje 

El que fue catalogado como milagro de los Corporales de Daroca recoge que en 1238, en el marco de la Reconquista cristiana de la península, Daroca se convirtió en un importante lugar de culto y peregrinación. En este municipio se conserva y se venera la reliquia del paño ensangrentado con las marcas de las seis hostias consagradas. Los Corporales de Daroca se conservan en la iglesia de Santa María, en un relicario de oro donado por los Reyes Católicos

En 1238, Berenguer de Entenza, noble de la época, lideraba las compañías llegadas de Daroca, Calatayud y Teruel para contener a los musulmanes, tras la conquista de Valencia por Jaime I. Los musulmanes sitiaron a los cristianos. La celebración de la misma se vio interrumpida por la batalla y el sacerdote conservó ocultas las formas. Cuando volvió para recogerlas y levantó el paño donde se guardaban las seis hostias consagradas, comprobó que habían quedado cubiertas de sangre. Aquel hecho fue catalogado como un milagro y los cristianos se lanzaron a la lucha, mostrando las formas ensangrentadas. Finalmente, los musulmanes fueron derrotados.

También es parte de la leyenda que el lugar en el que conservar los corporales debía ser Daroca. Se cuenta que, por tres veces, se dejó al azar elegir el destino para guardarlos y la suerte siempre quiso que fuera esta localidad de Zaragoza la elegida.