Sin avances en la reunión entre Rusia y Ucrania en Turquía mientras sigue el bloqueo de Mariúpol

Cuando se han cumplido quince días desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania, las fuerzas ucranianas continúan resistiendo la ofensiva desde distintas direcciones mientras varios miles de civiles han podido ser  evacuados de otras ciudades, especialmente en el norte, gracias a los corredores humanitarios pactados entre las partes.

Pero la situación es muy diferente entre el norte y el sur, y el corredor humanitario acordado entre Ucrania y Rusia para evacuar a la sitiada ciudad de Mariúpol (situada en el sureste, entre la anexionada península de Crimea y la región separatista prorrusa del Donbás) se encuentra totalmente bloqueado, mientras el abierto en los alrededores de Kiev está funcionando. Una localidad que cuenta con medio millón de habitantes, que no tienen electricidad, ni agua, ni comida, ni siquiera para los niños; y la gente está enfermando por el intenso frío, según ha advertido este jueves el jefe de la oficina de la Cruz Roja en esta ciudad.

Fracaso de las conversaciones en Turquía

La reunión celebrada este jueves en Antalya (Turquía) entre los ministros de exteriores de Rusia y Ucrania, Sergei Lávrov y Dmitro Kuleba, no ha arrojado novedades significativas en la búsqueda de un alto el fuego o la apertura de corredores humanitarios. Kuleba acusa a Rusia de ofrecerles la rendición como única alternativa. Lávrov, por su parte, ha dicho que el presidente ruso Vladímir Putin estaría dispuesto a reunirse con su homólogo ucraniano, Volodymyr Zelensky, pero cree que las negociaciones con Ucrania deben seguir el formato de las mantenidas previamente en terreno bielorruso.

Según ha explicado Kuleba, el ministro ruso le ha transmitido  que seguirá con su ataque hasta que se cumplan sus demandas y que eso significa la rendición. Algo que, para Kuleba, "no es aceptable". El ministro ucraniano ha asegurado  que su país está dispuesto a buscar soluciones pero no a rendirse.

Preguntado sobre si Rusia estaría dispuesto a un cese de las hostilidades, como un compromiso de Ucrania de no entrar en la OTAN y no reconocer la independencia de dos provincias pro rusas en el Este del país, Kuleba ha afirmado que su sensación tras la reunión de hoy es que Moscú, asegura, "no está en este momento en posición de acordar un alto el fuego".

Así mismo, Kuleba le ha dicho a Lávrov que las acciones que Rusia está desarrollando en Ucrania son "crímenes de guerra", ha dicho, y todos los que estén involucrados "acabarán respondiendo, eventualmente", al tiempo que ha demandado a Lávrov que esta conversación llegue al Gobierno y al Ejército ruso para crear corredores humanitarios.

Por su parte, Lávrov ha asegurado al término de la reunión que el presidente ruso, Vladimir Putin, está dispuesto a un encuentro con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky si esta reunión aporta, ha dicho un "valor añadido" y sirve para llegar a una solución y para "fijar acuerdos concretos". No obstante, ha indicado que reuniones como la de este jueves con Kuleba no sustituye la 'vía bielorrusa' que, para Lávrov, es el único formato viable.

"La conversación de hoy ha confirmado que esta vía no tiene alternativa", ha dicho, al referirse a la validez que le da Rusia a los encuentros en Bielorrusia. La intención no es crear una "vía paralela", como posiblemente sea la idea de la parte ucraniana, ha dicho. Y cree que la búsqueda de nuevos formatos por parte del gobierno ucraniano solo pretende "mostrar una actividad" que sustituye el "trabajo real".

El FMI cree que las sanciones económicas pueden producir la bancarrota de Rusia

El Fondo Monetario Internacional (FMI) sugirió hoy la posibilidad de que Rusia entre en bancarrota a causa de las sanciones económicas impuestas por el resto de países por su invasión de Ucrania, y ha alertado de que la economía rusa ya se está contrayendo y se aboca a una recesión profunda.

"La bancarrota de Rusia ya no es improbable", dijo la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, en un encuentro digital con periodistas para tratar las implicaciones financieras de la guerra en Ucrania. Ha apuntado a que lo que determinará lo fuerte que sea la recesión en Rusia será la duración de la guerra y de las sanciones, así como la posibilidad de que estas se endurezcan más y afecten a las exportaciones de energía.