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MASCOTAS

Tres perros por cada 10 vecinos: ¿cómo se adapta Aragón a sus nuevos habitantes?

Los ayuntamientos de las tres capitales de provincia trabajan para mejorar y aumentar las zonas de esparcimiento canino, además de impulsar campañas de concienciación para mantener limpias las calles

L.B / T.P.A / EFE /
Varios perros en la zona de 'agility' del recinto Expo. / Ayuntamiento de Zaragoza
icono foto Varios perros en la zona de 'agility' del recinto Expo. / Ayuntamiento de Zaragoza

Aragón es la segunda autonomía española con mayor número de perros por habitante. Actualmente, la Comunidad cuenta con tres canes por cada diez vecinos, lo que supone que, en total, hay 398.225 de estas mascotas, según el censo de población del Instituto Nacional de Estadística (INE) y los datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Alimentos para Animales de Compañía (Anfaac).

Solo Asturias supera esta tasa, alcanzando los 3,5 perros por cada decena de residentes. En el lado contrario se encuentran La Rioja, el País Vasco y Navarra, que se encuentran por debajo de un can por cada diez personas. En términos absolutos, en España hay 47.307.133 habitantes y 9.280.821 perros.

Las datos también reflejan que en todas las comunidades autónomas hay más canes que niños. En el caso de Aragón, hay 2,2 perros por cada menor de 14 años.

Ante este aumento de la población canina, las ciudades han emprendido distintas acciones para mejorar la convivencia entre animales y vecinos. En el caso de Zaragoza, hay seis zonas de esparcimiento canino de titularidad municipal, ubicadas en el parque Tío Jorge, parque Grande José Antonio Labordeta, plaza de Los Sitios, parque Miraflores, parque de Los Poetas y Santa Isabel. Algunas de ellas cuentan con un espacio vallado y cartelería que muestra la normativa que rige su uso. De esta forma, el Ayuntamiento fija localizaciones en las que los perros pueden correr en libertad, sin interferir con los viandantes y evitando los problemas que pueden tener con el tráfico. 

El aumento de perros en los domicilios zaragozanos hace que muchos vecinos los lleven como acompañantes en algunas de sus gestiones diarias. Para favorecer su inclusión en el día a día, el Consistorio zaragozano permite, desde el pasado 1 de febrero, el acceso de animales domésticos a dependencias municipales. En concreto, las mascotas pueden acceder a las zonas de información y atención al público, siempre sujetos con correas.

En el caso de Teruel, el Ayuntamiento apuesta por crear nuevos espacios de esparcimiento canino, que se sumarían a los ya existentes en el barrio de la Fuenfresca y en la calle Compromiso de Caspe. "Se quiere desarrollar zonas dentro de los parques en los que ahora no se permiten perros y adaptar espacios para que los dueños puedan estar con sus perros", explica Pilar Sánchez, concejal de Parques y Jardines. 

Además, la Corporación está trabajando en mejorar la protección animal, cumpliendo de esta forma con las nuevas exigencias de la reciente Ley de Bienestar Animal. "Hemos aprobado, inicialmente, la creación de un Consejo de Participación de Sanidad y Protección Animal Ciudadana, en el que estén integradas todas las asociaciones vecinales, de forma que nos reunamos cada seis meses para tratar cuestiones relativas a la convivencia con los animales (perros y gatos, sobre todo)", indica el concejal turolense de Sanidad y Protección Animal, Julio Esteban. 

Tanto uno como otro coinciden en que la nueva normativa estatal debe terminar de desarrollarse para que los ayuntamientos puedan cumplir con sus obligaciones, como la recogida y cuidado de animales abandonados, para las que piden dotaciones económicas. 

Zonas de esparcimiento canino e iniciativas cívicas

Los conocidos como 'pipicanes' o zonas de esparcimiento son comunes en las tres capitales de provincia. En Huesca hay seis lugares acotados y vallados para que los perros puedan disfrutar sueltos y relacionarse sin peligro: en el barrio de Los Olivos, en el paseo Ramón y Cajal, la calle Fuente del Ibón, el parque del Isuela y el cerro de San Jorge. 

Por otro lado, las tres ciudades han llevado o llevan a cabo diversas iniciativas para mejorar la convivencia y el civismo. En la capital oscense, por ejemplo, el pasado año el Ayuntamiento lanzó la campaña 'Cuidad la ciudad', en la que apelaban, entre otras cosas, a que los propietarios de perros limpiaran los excrementos de sus canes para facilitar la limpieza de las calles y de las zonas verdes. 

De igual modo, el Consistorio zaragozano viene desarrollando diferentes campañas de concienciación, como 'Nos gusta tu perro, no sus cacas. Recógelas' o 'Tu pipí me destruye', ambas apelando a una mayor conciencia de los dueños para evitar residuos y molestias al resto de ciudadanos. De hecho, el Ayuntamiento ha repartido unas 50.000 botellas para limpiar los orines y 7.000 pegatinas para marcar esquinas y mobiliario especialmente castigado.