El turismo deportivo: un filón económico para Aragón

Que el deporte es bueno es una afirmación incuestionable, pero no solo se trata de un asunto relativo a la salud. Y para regiones como Aragón que, por su orografía, resultan un entorno privilegiado para el desarrollo de un gran número de actividades físicas, el fomento de estas prácticas también puede convertirse en un motor para la economía. De hecho, según un estudio elaborado por la Dirección General de Turismo de la Comunidad, al año, solo el senderismo mueve a más de un millón y medio de personas, cuyo gasto diario es de unos 60 euros. Pero la práctica de otros deportes también atrae a numerosos visitantes.

Este sábado, la comarca de las Cinco Villas, en Zaragoza, acoge La Rompepiernas 2022, una de las principales citas ciclistas de la temporada, que no solo llenará las carreteras de la zona durante la prueba, sino también los bares, restaurantes y alojamientos.

“El movimiento de turistas que atrae es muy alto”, afirma Santos Navarro, presidente de la comarca de las Cinco Villas. “Los deportistas que se van a apuntar primero vienen a conocer el terreno y, después, acuden a la prueba acompañados de familiares. Desde que hemos apostado por este tipo de turismo, en la comarca hemos notado una mayor afluencia de gente. No solo por los municipios por los que pasan las distintas pruebas, también en los más próximos. Además, la gente viene, conoce el sitio, y quiere volver. De ahí que apostemos tan fuerte por apoyar estos eventos", señala.

A lo largo de 2022, la comarca de Tarazona y el Moncayo, una de las más prolíficas en este tipo de celebraciones, será el escenario de más de 40 pruebas. Para Pablo Escribano, consejero delegado de Deportes, la visita de los participantes se traduce en un impacto positivo para todo el sector servicios. "Hace apenas unas semanas, unos 1.000 corredores, aragoneses y de otras comunidades, con sus respectivos acompañantes, viajaron hasta Añón, una población de un centenar habitantes, para participar en la Moncayo Trail Barranco de Horcajuelo. Obviamente, el resto de las localidades vecinas ayudaron a absorber a todos estos visitantes, lo que genera beneficios en toda la zona", señala Escribano, quien, además, apunta que también "es una forma de darse a conocer al exterior: la historia, los monumentos...".

Territorio privilegiado para el senderismo

“Aragón es un territorio privilegiado para la práctica del montañismo", asevera Javier Franco, presidente de la Federación Aragonesa de Montaña (FAM). "Todos los municipios quieren tener senderos que ofrezcan una alternativa de ocio para sus visitantes. Los estudios realizados a iniciativa de la Dirección General de Turismo del Gobierno de Aragón muestran que, a la hora de elegir el destino, un 69,2% de nuestros visitantes afirma verse influenciado por la presencia de diferentes opciones senderistas en la zona".

En cuanto a los datos que la presencia de estos turistas, que sobrepasan el millón y medio al año, deja en la Comunidad, el presidente de la Federación señala: "El gasto medio en la zona es de 60 euros al día, lo que nos habla de cifras relevantes". "La presencia de los senderos homologados por la FAM en el territorio ha dado paso a otro tipo de prácticas que generan riqueza, como son las actividades organizadas y las pruebas deportivas. Solo por poner un ejemplo -apunta-, las andadas populares de Aragón mueven más de 25.000 personas al año, a lo que hay que añadir los autobuses que semana a semana se fletan desde los clubes de montaña para conocer y disfrutar de nuestra tierra".

Por las posibilidades que ofrece su escarpada silueta, la provincia altoaragonesa es una de las que acoge un mayor número de eventos deportivos. Para evaluar el impacto económico de estas competiciones oficiales, la Diputación Provincial de Huesca elaboró un estudio en 2016 que analizó cinco de las pruebas más relevantes, incluida la Gran Trail Anet-Posets, una de las más duras y populares. El informe concluyó que los 54.013 inscritos, más acompañantes, de las cinco competiciones objeto de estudio generaron un gasto directo y de incremento de la renta de casi 3.500.000 euros. Por lo que, extrapolando estos datos, el trabajo estimaba que los 229.375 inscritos en el total de las 127 celebradas aquel año en la provincia habrían generado un incremento en la renta de 14.841.394 euros, un aumento en la producción de 25.840.417 euros y un impacto sobre el empleo de 229 trabajadores. "Es decir, podemos afirmar con certeza que el montañismo es una fuente de riqueza muy relevante en el conjunto de la economía aragonesa”, concluye Franco.