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Begoña García disputa este domingo la final de la Copa de la Reina

La zaragozana ha anotado el empate en el minuto 37 para el Club de Campo madrileño

Aragón Deporte /
Begoña García, de espaldas con el número 11, junto a sus compañeras.
icono foto Begoña García, de espaldas con el número 11, junto a sus compañeras.

El Club de Campo ha superado a la UD Taburiente en las semifinales de la Copa de Reina. De esta manera, la zaragozana Begoña García volverá a pelear por este título para ampliar de esta manera su palmarés. El Junior FC será el rival del equipo madrileño, reeditando el encuentro por este mismo título celebrado hace un año en Valencia y que en aquella ocasión se llevaba el conjunto catalán.

El encuentro ante el Taburiente ha sido igualado en su período inicial, que apenas vio una oportunidad clara en ambas áreas. En la del Club, con una bola que se paseaba sin remate certero para las canarias. En la del “Tabu”, con una que no acaba de entrar en su portería por poco. Todo cambiaría en el segundo acto con la llegada de los primeros penaltis córner. Las madrileñas lo botaban sin consecuencias, sin embargo, el de las insulares finalizaba en la señalización de un stroke, que no desaprovechaba Agustina Gorzaleny para romper el equilibrio en el luminoso (0-1, Minuto 22). Una variación que desató ofensivamente a las de Eduardo Aguilar, que se marcharon a por el empate. Varias acciones pudieron llevar a término esa circunstancia, pero la buenas intervenciones de la zaga de las de David Quintana y de su portera; Cintia Santana, impidieron que así fuera.

Algo que no cambió al superar el ecuador, que con la reanudación, llegó con un gol de insistencia de Begoña García (1-1, Minuto 37). Un enuentro, que a partir de ese instante se volvió a igualar, hasta que la última jugada de este parcial, una acción coral entre Beatriz Pérez y Candela Mejías, la materializaba la cántabra en el segundo para las actuales subcampeonas de esta competición (1-2, Minuto 52). Ya el último acto, las madrileñas consiguieron enfriar un partido que no tuvo demasiadas ocasiones de modificar un resultado, que definitivamente, les llevaba a disputar una nueva final copera.