La SD Huesca quiere empezar bien el curso en El Plantío

No va más. La SD Huesca abre este domingo por la tarde la temporada en la Segunda División. Lo hace en El Plantío, enfrentándose a un Burgos CF (17:00 horas) que el curso pasado fue una de las sorpresas amables y uno de los equipos más férreos de la categoría. Los oscenses, apoyados en la fortaleza defensa que destacó sobre todo en el tramo final de la campaña pasada, buscará arrancar el año con buen pie pese a todas las dificultades que han padecido este verano.

Porque la SD Huesca de esta temporada en poco se parece a la del año pasado. Ha visto irse a hombres importantes como Andrés Fernández, Marc Mateu, Juan Carlos Real, David Timor o Florian Miguel y se espera la salida de otros como Andrei Ratiu. Por suerte para Ziganda, la defensa, la línea más solvente el curso pasado, se mantiene casi intacta. Sobre ella va a intentar pivotar la idea de juego del equipo este curso el técnico ante la escasez de caras nuevas en las líneas más adelantadas. El técnico ha trabajado durante todo el verano con una línea de cinco que quiere que sea la seña que sostenga a un Huesca que se encomendará en ataque al acierto de Obeng.

El Burgos, por su parte, también apunta a ser un equipo algo diferente este curso. El cambio empieza por el banquillo con la llegada de Jon Pérez Bolo y continúa en una plantilla que presenta hasta siete fichajes tras las once salidas que se han producido este verano. El nuevo técnico quiere imprimir al equipo un carácter más ofensivo y podría apostar por un esquema de dos puntas para enfrentarse al Huesca. En ese equipo, Bolo no podrá contar con los lesionados Alex Bermejo y Javi Pérez, pero sí ha entrado en la lista Appin, reciente fichaje del conjunto burgalés que empezará el duelo en el banquillo.