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La SD Huesca quiere dar un paso al frente en La Cerámica

El equipo oscense busca esta tarde una victoria ante un rival directo en la pelea por el descenso

Aragón Deporte /
La SD Huesca busca salir este domingo de la zona de descenso. Foto: SD Huesca
icono foto La SD Huesca busca salir este domingo de la zona de descenso. Foto: SD Huesca

La SD Huesca afronta inicia este domingo un tramo de la competición de importancia capital. Como primera parada, visita al Villarreal B, equipo que ahora mismo ocupa la decimonovena plaza de la Segunda División, abriendo la zona de descenso y precediendo al conjunto azulgrana con un punto más. Un partido por tanto cuyos puntos en juego adquieren aún más valor por ganárselos a un rival directo y por el valor moral que el resultado puede tener. Un duelo que abre un mes de competición que luego completarán Alcorcón, Eldense y Amorebieta en un periodo del calendario que puede dejar algo definido el futuro de la SD Huesca de cara al tramo final de la temporada.

La SD Huesca alcanza este partido animada y con confianza. Pese a que encadena dos jornadas sin ganar la Segunda División (derrota ante el Eibar la jornada pasada y empate en casa del Sporting hace dos) las sensaciones que viene dejando el equipo son buenas, lo que ha reforzado la moral de un equipo que es plenamente consciente de lo que se juega en esas próximas semanas. Antonio Hidalgo ha desplazado hasta tierras castellonenses a sus dos nuevas incorporaciones: Elady y Carlos Gutiérrez. El primero ya está inscrito en LaLiga y podrá jugar si Antonio Hidalgo lo considera oportuno, mientras que el segundo está pendiente de que se resuelvan los trámites burocráticos necesarios para su inscripción y por tanto será duda hasta saber si llega su transfer a tiempo o no.

El Villarreal B tampoco llega en buen momento a la cita. Acumula tres jornadas sin ganar que le han llevado a la zona de descenso en el momento de iniciarse el encuentro mañana en La Cerámica. Miguel Álvarez tiene a todos sus jugadores disponibles, con lo que podrá alinear a su once de gala para un duelo en el que la victoria vale más que tres puntos.