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INTERNACIONAL

Brexit, covid y guerra en Ucrania: el Parlamento Europeo se despide de una de las legislaturas más complicadas

Actualmente, uno de los grandes retos de la UE está en las costas. Más de 280.000 personas llegaron a ellas en 2023

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Los 705 europarlamentarios debaten, elaboran y aprueban leyes que llegan a todos los rincones de una Europa.

La legislatura que termina en el Parlamento Europeo ha sido una de las más complicadas. En estos cinco años, ha demostrado su capacidad negociadora tras la salida del Reino Unido y su respuesta coordinada ante la pandemia. La Guerra de Ucrania ha puesto a prueba a la Unión.

Con una despedida anunciada comenzó el Parlamento Europeo su actual legislatura. Tras casi medio siglo, Reino Unido dijo adiós a la UE. El Brexit supuso negociaciones maratonianas. Se acababa, entre otras cosas, la libre circulación de mercancías y personas.

Casi al mismo tiempo los europarlamentarios tuvieron que lidiar con otra batalla. La pandemia obligó a Europa a caminar totalmente acompasada. Era la única manera de frenar el avance del virus y recuperar el pulso económico. 750.000 mil millones de euros destinó a ello.

En 2022 fue la guerra la que acaparó buena parte de sus sesiones. La invasión rusa en Ucrania agitó de nuevo el tablero y los 27 mostraron que la Unión estaba unida. Dieron su apoyo incondicional al gobierno de Zelenski, y comenzó el proceso para su adhesión. Además, llegaron las esperadas sanciones al Kremlin.

Actualmente, uno de sus grandes retos está en las costas. Más de 280.000 personas llegaron a ellas en 2023. El nuevo pacto de migración ha generado intensas discusiones entre los estados miembros y el descontento generalizado de organizaciones humanitarias. Entre otros aspectos, permite a los países eludir la acogida de migrantes a cambio de una compensación económica.

Y así, los europarlamentarios debaten, elaboran y aprueban leyes que llegan a todos los rincones de una Europa en constante transformación. Prueba de ello es el propio Parlamento. Mucho ha cambiado desde las primeras elecciones directas de 1979. Entonces, la representación de la extrema derecha era casi inexistente. Ahora podrían ocupar un papel decisivo en un proyecto, el de Europa, que, curiosamente, siempre han rechazado.