El 31% de los aragoneses en silla de ruedas tiene que cambiar de domicilio por problemas de accesibilidad

En Aragón viven 117.700 personas con discapacidad, cifra que sube en España a 4,3 millones. De ellas, un 55,7% tienen movilidad reducida. Un problema que se agudiza por la falta de accesibilidad en el hogar, ya que el 22% de los aragoneses con este tipo de discapacidad han tenido que cambiar de domicilio y la cifra ascienda al 31% para personas que viven su día a día en silla de ruedas.

Actualmente, existen barreras arquitectónicas en el 35% de los hogares de la Comunidad y un 18% del colectivo ha tenido que hacer adaptaciones para preservar su independencia. Este domingo se celebra el Día Internacional contra la Discapacidad

El 'Proyecto Rumbo' ofrece autonomía personal e inclusiva. Casi 50 personas con algún tipo de discapacidad o dependencia se benefician en Caspe de esta iniciativa, con la que reciben asistencia domiciliaria en casa. Amparo Sancho es una de ellas. Pasa mucho tiempo en su casa y cuenta con la ayuda de Silvia Salas para realizar las tareas cotidianas, como lavar, ir de compras o al médico. Con el programa, además, se logra una segunda función: la de generar empleo.

Un iniciativa que también llega hasta Zaragoza capital. Allí, Jesús Gabriel Corral vive en un piso completamente adaptado. Los armarios de la cocina están automatizados y el grifo es plenamente accesible. Lo que ocurre es que ese no es su domicilio definitivo. Se trata de uno de transición, en el que se le ayuda a desenvolverse hasta que tenga su propio domicilio.

Ahora, el proyecto llega a su fin porque ha estado financiado con los fondos europeos que finalizan este mes. Por eso, Josema Jariod, presidente de la Asociación de Ayuda a las Personas con Discapacidad de Caspe y Comarca, pide su continuidad ante los buenos resultados obtenidos.

Carrera solidaria en Teruel

Para fomentar la integración, la convivencia y la promoción de las personas discapacitadas, se ha celebrado en Teruel la Carrera Solidaria por la Discapacidad. Se trata de un evento deportivo que, lejos de ser competitivo, puede realizarse corriendo, andando, con carritos de bebé, o en silla de ruedas. "Al final, es una jornada de integración donde, tanto las personas con discapacidad como sin ella, podemos disfrutar de una jornada y visibilizar las necesidades que los distintos colectivos tenemos", ha señalado una de las organizadoras de la carrera solidaria. 

La recaudación obtenida se va a destinar a diferentes actividades que llevan a cabo desde las asociaciones turolenses que trabajan con personas con el colectivo y que están englobadas en el Grupo Avanzamos.