El campo aragonés espera una cosecha de cereal de invierno dentro de la media

El campo aragonés espera una cosecha de cereal invierno dentro de la media de los últimos años. Las lluvias de mayo podrían mejorar un poco las previsiones, pero si aparece el granizo echaría al traste las expectativas. 

Por el momento los campos de cereal de secano en el Jiloca están en estos momentos espesos y a punto de espigar. Las lluvias de los meses de marzo y abril dejan buenas expectativas para la próxima cosecha en la provincia de Teruel. De hecho, allí se esperan unos 4.000 kilos por hectárea. Pero los agricultores siguen mirando al cielo.

"El invierno ha sido un poco seco, pero ahora este último mes y el mes pasado ha llovido bastante y es cuando la flor está creciendo a punto ya de espigar, y es un momento clave. Sobre todo mayo, que llueva otro poquito y que nos respete el tiempo y piedra que no caiga. Sobre todo en junio", explica José Manuel Marco, responsable comarcal de UAGA. 

Por su parte, en Huesca, la cosecha de cereal de invierno estará en la media. Pero preocupa la poca reserva hídrica del embalse de Mediano, ya que su agua es fundamental para regar las siembras de maíz y soja tardías, o las que se plantan en junio. Ahora ya trabajan con cupos de riego de 3.600 metros cúbicos por hectárea.

El presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, resalta: "Si seguimos con cupos, pues cada cual, cuando llegue el momento de sembrar la segunda cosecha, que es normalmente la segunda quincena de junio, tendrá que pensarse muy mucho cuántas hectáreas pone", asegura. 

Mientras tanto, los regantes de las Bardenas también recogerán una cosecha de invierno en la media. Eso sí, esperan un deshielo lento para garantizar el riego de las segundas cosechas en sus 92.000 hectáreas.