El hospital San Juan de Dios ha acompañado a más de 7.000 pacientes con enfermedades avanzadas desde 2008

Alrededor de 15.000 aragoneses, entre pacientes y familiares, han recibido el apoyo del Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas de la Fundación La Caixa desde que se puso en marcha, en noviembre de 2008. Una iniciativa que se desarrolla en el hospital San Juan de Dios de Zaragoza, en la que colabora también el Departamento de Salud, y que tiene como objetivo el acompañamiento de pacientes con enfermedades crónicas avanzadas y vulnerables, que se encuentran al final de su vida, y de sus familiares.

Desde su implementación en la comunidad, se ha atendido a 7.088 pacientes y 7.884 familiares, subrayando su compromiso con la mejora de la calidad de vida de estas personas. Una de esos familiares ha sido Angélica, que se mostraba muy agradecida al equipo que acompañó a su hija durante la enfermedad que, desgraciadamente, se la llevó. Personal, apunta, que estuvo con ella durante todo el proceso y que ahora le ayuda a llevar el duelo. “Puedo decir que son mis salvadores, tanto los de paliativos que cuidaban a mi hija, como ahora Blanca, que me está ayudando muchísimo, para salir del pozo en que me he visto entrar”, señalaba en declaraciones a Aragón Radio. “Me ha ayudado un poco a ver la luz al final de túnel”, añadía Angélica.

Hay tres equipos de Atención Psicosocial vinculados al Hospital San Juan de Dios dentro de esta iniciativa, uno en cada provincia, de los que una parte fundamental es la de los psicólogos. Estos profesionales  acompañan, junto a médicos y enfermeros, a los pacientes que están en la fase final de su vida durante todo el recorrido, y también a los familiares, que deben afrontar el duelo. “Hay personas que además de la tristeza, sufren otras cosas, como la culpa o la preocupación por asuntos pendientes”, apunta Blanca Cativiela, psicóloga en el centro de San Juan de Dios en Alcañiz.

“Lo que considero fundamental, o lo que principalmente aportamos es que la persona, esté en el momento en el que esté, se sienta acompañada a lo largo de todo el duelo y tenga un espacio seguro en el que poder hablar y poner palabras al dolor, poder expresarse, reflexionar…”, explica.

Se estima que la atención psicosocial ofrecida por el programa, que cuenta también con el apoyo del Gobierno de Aragón, mejora los síntomas emocionales en el 90% de los casos.

Esta atención es especialmente importante en el caso de los pacientes que no tienen familiares. Emilio González, director médico del Hospital San Juan de Dios de Zaragoza, apunta a que se encuentran en esta situación entre el 15 y el 20% de los enfermos, y todavía es un porcentaje mayor en el ámbito residencial. “En estos casos, el impacto de la pérdida, sin tener ningún apoyo, se hace mucho más duro que para el paciente que tiene soporte familiar y sí puede cuentar con ese apoyo emocional. Aunque también se sufre, es de otra manera”, asegura.

En Zaragoza, los profesionales intervienen en el Hospital San Juan de Dios y en los equipos de atención domiciliaria del Sector I y en Calatayud. Se presta servicio también en cinco residencias. Y en las provincias de Huesca y Teruel, los equipos también actúan en la  Atención Domiciliaria, para llegar además a las poblaciones rurales de Barbastro y Alcañiz.