Los continuos ataques de Rusia sobre Ucrania dejan un reguero de pueblos 'fantasma'

Una nueva ofensiva de Rusia sobre Ucrania ha dejado tres muertos y 19 heridos. Varios proyectiles rusos han caído sobre una zona de viviendas de la ciudad de Jarkov, dejando las calles arrasadas. Mientras, el ejército ucraniano ha atacado el puesto de mando de una brigada de fusileros motorizada rusa en la región de Bélgorod.

Se trata de un ataque con drones, que según el gobierno ruso, ha dejado un civil fallecido en la ciudad de Gráivoron.

A todo eso se suma que la guerra de Ucrania está dejando un pueblo 'fantasma' tras otro. Ante el avance ruso, son muchos los que deciden dejar sus hogares en busca de lugares más seguros. Otros, sin embargo, resisten en sus casas o como voluntarios en el frente, con la esperanza de que la guerra termine pronto.

Las calles desiertas de Yampil, al este de Ucrania, son ejemplo del abandono al que ha obligado la guerra. El avance ruso y su cercanía al frente lo han convertido en un pueblo fantasma. "La gente está huyendo", cuenta un vecino.

A pesar de que cohetes y misiles caen a su alrededor, él promete quedarse, aunque no sin miedo: "Cuando los rusos vinieron por primera vez, no eran tan crueles. Ahora, no prestan atención a si eres civil, militar o anciano". 

Jarkov actualmente. / Aragón TV

Cerca de esta ciudad, en Bohorodynche, Yuri ve también como su pueblo está prácticamente destrozado: "Antes, había una carretera y tráfico. Lo he perdido todo, pero lo principal es que estamos vivos y creo que el pueblo será reconstruido".

Vitaly es un médico ucraniano que se alistó en el ejército como cirujano. Dos años después del comienzo de la guerra, el goteo de heridos es incesante. "No hay día en el que los rusos no presionen. Atacan y avanzan", reconoce Vitaly, cansado de la situación.

Ese es el día a día de muchos ucranianos que conviven con los ataques, pero resisten con la esperanza de que todo vuelva a ser como antes de la guerra.