Los mayores de 65 años y los trabajadores al aire libre son los más propensos a sufrir un golpe de calor

Aragón se aproxima en alguna zona este fin de semana a los 30 grados de temperatura. En el 2023 se produjeron en la comunidad 147 muertes directamente ligadas al calor. Los expertos alertan de que los mayores y los trabajadores al aire libre deben ser los colectivos sobre los que más se incida en la prevención, ya que son los dos grupos que más riesgo tienen de sufrir un golpe de calor.

"Las personas mayores tienen más riesgo que las jóvenes de sufrir una deshidratación y esto se debe a que la sensación de sed esta abolida en los ancianos", asegura la doctora en Geriatría, Paloma González.  Esta facultativa añade que este colectivo "no tiene esa necesidad de beber y por eso se hidratan menos". Por eso es muy importante que si tenemos a personas mayores a cargo, se les "obligue a beber agua como si de un tratamiento médico se tratase". También es recomendable no exponer a estas personas al sol y ser conscientes de la humedad del ambiente.

A nivel laboral, a pesar de que ya existen decretos ley sobre realizar trabajos en episodios de calor extremo, los sindicatos reconocen que todavía queda mucho por mejorar. Desde la sección de Seguridad Laboral de Comisiones Obreras, Luis Clarimón entiende que hay actos que se pueden reorganizar si suponen un riesgo para la salud. "No es necesario barrer la plaza de un pueblo a las 16:00 de la tarde -ejemplifica-, ya que es un trabajo que puede hacerse de noche".

Los sindicatos afirman que además de los riesgos para la salud, la productividad baja y "se producen más siniestros derivados de la falta de concentración porque se descansa menos y peor". Por eso piden a las administraciones que se "regule con más detalle". Algunas empresas, las más grandes, sí tienen protocolos contra el calor. En las más pequeñas, la situación es distinta, advierten.