Un farmacéutico turolense demuestra las propiedades digestivas del té de roca

Rojo, negro, verde o blanco. Son algunas de las variedades de té más conocidas, pero, en el día mundial dedicado a esta infusión, el de roca se reivindica en Aragón. La sabiduría popular ya reconocía sus propiedades. Ahora, además, lo ha demostrado un farmacéutico turolense. Mariano Giménez ha corroborado científicamente en su tesis doctoral su efecto protector del aparato digestivo utilizando un extracto de esta sustancia.

"Cada planta tiene unos componentes bioactivos, que son como los principios activos de los medicamentos -explica el doctor en Farmacia-. Están los polifenoles, los flavonoides, los taninos... Entonces, lo que vimos es que el té de roca tenía unos que tienen efectos antioxidantes y antiinflamatorios, lo que hace que tenga determinados efectos beneficiosos. Eso justifica que en la cultura tradicional haya sido utilizado para tantas cosas".

Recoger té de roca del monte está prohibido. Por eso, quienes deseen beneficiarse de las propiedades de sus infusiones pueden conseguirlo en farmacias y herboristerías. Crece en terrenos áridos y expuestos a mucha luz solar. En esta época del año está en pleno crecimiento. Su floración se extiende desde finales de julio hasta septiembre, momento en el que tradicionalmente se ha recolectado.

"El sabor es más parecido a un anís, tiene incluso un poco de picante. Históricamente se ha utilizado para los dolores digestivos y se recomendaba tomarlo en infusión", señala Guillermo Cano, aficionado a la botánica.