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CAMPAÑA ANTIPLAGAS

Zaragoza pide a los ciudadanos dejar de alimentar a palomas, patos o gatos

El Instituto de Salud Pública tramitó 153 denuncias por molestias relacionadas con las palomas el año pasado. También se realizaron más de 2.000 tratamientos de desratización y 372 de desinsectación

ARAGÓN NOTICIAS /
icono foto Una persona alimenta palomas en la vía pública

El Ayuntamiento de Zaragoza ha lanzado una nueva campaña de concienciación para pedir a los ciudadanos que dejen de alimentar a palomas y patos en la vía publica, debido a que esto provoca la sobrealimentación de otras especias y favorece la generación de plagas. Bajo el lema 'Dar de comer a las palomas/patos sobra' se pretende apelar a la colaboración ciudadana antes de recurrir a sanciones. 

La consejera municipal de Servicios Públicos y Movilidad del Ayuntamiento, Natalia Chueca ha informado que en 2020, el Instituto de Salud Pública ha recibido 153 denuncias por molestias relacionadas con las palomas y solicitando capturas. Se han capturado 2.043 ejemplares y se realizaron 2.097 tratamientos de desratización y 372 de desinsectación.

Chueca ha reconocido que "todos lo hemos hecho", en referencia a que alimentar a palomas con niños pequeños es visto como un "gesto amable", pero que genera consecuencias "peligrosas" y pueden desencadenar en un "grave problema de salud pública" al ser las plagas un foco de transmisión de enfermedades. Junto a la problemática generada por dar comida a los animales en las calles, se añade otro foco, que es dejar basura fuera de los contenedores, lo que provoca que las ratas acudan a estos lugares a alimentarse. "Dejar basuras fuera de los contenedores provoca que sean otros animales, concretamente ratas o gatos, los que vayan a buscar qué comida hay en las bolsas de basura alrededor de los contenedores", ha explicado. 

La consejera ha recordado también que alimentar animales en la calle está sancionado por la ordenanza de limpieza pública, pero ha admitido que hay muy pocas denuncias en este ámbito y un gran desconocimiento por parte de la ciudadanía de que se trata de una conducta sancionable. Por ello, la consejera ha apostado por incidir en las campañas de concienciación, para acabar también con ese "desconocimiento". 

De forma paralela a esta campaña, el Instituto de Salud Pública trabaja en la última fase para la próxima adjudicación de un contrato de servicios para el control integral de plagas en el municipio. Este contrato tiene un importe inicial de 273.000 euros anuales, lo que supone un 390% más que los 70.000 euros que se venían destinando hasta ahora a este tipo de intervenciones.

Mediante este contrato, se desarrollará un programa integral que no solo sea de tipo "correctivo", con la actuación ante quejas y denuncias, sino que permita prever la presencia de plagas con tratamientos anticipados, antes de causar molestias a los ciudadanos. Para ello, se priorizará el uso de métodos ecológicos, y se eliminará de forma progresiva el uso de elementos químicos que afectan al medio ambiente.