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Aday Mara, una vida ligada al Basket Zaragoza

El pívot rojillo llegó en edad infantil y ha tenido una progresión con la que se le ha llegado a comparar con las estrellas nacionales que han llegado a la NBA

Aragón Deporte /
Aday Mara durante un partido con Casademont Zaragoza.
icono foto Aday Mara durante un partido con Casademont Zaragoza.

El pívot rojillo fue incluido esta temporada además en el mejor quinteto joven de la Liga Endesa. En sus estadísticas esta temporada, ha jugado en 22 partidos de la Liga Endesa, con unos guarismos de 5,3 puntos, 3,2 rebotes, 0,5 asistencias y 0,9 tapones en los 11 minutos de media que estuvo sobre la pista. 

Aday Mara llegó al Casademont Zaragoza en edad infantil y, desde entonces, su crecimiento fue mayúsculo, hasta llegar al primer equipo. Su estreno se produjo en noviembre de 2021, en la FIBA Europe Cup, en el partido de la fase de grupos ante el Reggio Emilia. Por otro lado, su debut en la Liga Endesa fue el 16 de octubre de 2022, ante el Baskonia, en la cuarta jornada de liga. Fue una actuación notable, al conseguir 8 puntos, 4 rebotes, una asistencia y un tapón en sus primeros cinco minutos de juego. Su mejor actuación fueron 15 puntos, 5 rebotes, 2 recuperaciones y 22 de valoración en 20:48 en el partido frente a Obradoiro.

Mara logró la medalla de bronce con el Casademont Zaragoza, el pasado mes de mayo, en el Campeonato de España de Clubes, y lo hizo con una autoridad manifiesta. En el encuentro por el tercer y el cuarto puesto, destrozó al Valencia Basket con unos guarismos de 31 puntos y 17 rebotes, finalizando el partido con 48 créditos de valoración. Además fue designado mejor jugador del torneo, tras haber promediado 19,1 tantos, 12,7 rebotes y 3,7 asistencias por duelo, lo que se traduce en 29,3 de valoración. Otro éxito del aragonés fue el subcampeonato del mundo sub-17 con la selección española el pasado verano. Entonces, el pívot contribuyó al éxito del combinado nacional con 12,6 puntos, 5 rebotes y 16,4 de valoración por partido en 18 minutos de juego.

Los jugadores de la NCAA no pueden recibir un salario por jugar, pero si pueden explotar sus derechos de imagen, algo conocido como NIL (Name, Image, Likeness). Comparado con grandes estrellas nacionales o otros jugadores que han llegado a la NBA, el futuro de Aday es uno de los más prometedores de las últimas décadas en el baloncesto español.