Aragón hereda de la primavera un verano muy cálido y seco

La estación de verano augura en Aragón una meteorología más cálida de lo normal y también más seca y viene a dar continuidad a lo experimentado en primavera. En este último trimestre las temperaturas han estado 0,8 grados por encima de la media del periodo 1991-2020 y ha llovido un 15% menos.

Así lo ha anunciado el delegado territorial de la Agencia Estatal de Meteorología, Rafael Requena, quien ha expuesto que en el pasado trimestre, tanto marzo como abril fueron muy cálidos y mayo fue más normal pero con unas anomalías que han ido de los 0,2 grados por debajo de la media registrados en Jaca y Fanlo-Refugio de Góriz y el grado y medio positivo de Montalbán. Números que la convierten en la novena primavera más calurosa desde, al menos, 1961.

En cuanto a precipitaciones, el carácter general fue de seco, con 24 litros menos por metro cuadrado. Sin embargo, hubo anomalías en relación a lo normal, del 75% por debajo de la media registrado en Andorra y del 68% más de lo habitual que cayó en Biescas-Búbal. Marzo fue muy húmedo, "el más lluvioso", con un 64% por encima de las medias de referencia, mientras que en abril, en cambio, llovió un 68% menos, con zonas de Teruel donde cayó un 95% menos.

Respecto a la sequía, Requena ha admitido que se mantiene y que, a pesar de que en España ha comenzado a llover a nivel general en los tres últimos meses, cree que "no hay argumentos para decir que la sequía se ha terminado" y todo dependerá de la evolución del verano.