Aragón, referente en el rescate de montaña medicalizado con más de cien rescates este año

Hace 25 años se puso en marcha el rescate de montaña medicalizado. Una iniciativa con la que Aragón se ha convertido en referente nacional e internacional en la seguridad y en el fomento de las buenas prácticas en el medio natural.

Con este método de rescate, en vez de trasladar a los accidentados, son los profesionales, hasta diez médicos y nueve enfermeros, los que se acercan al lugar del accidente. Cuentan con dos helicópteros y es resultado de la colaboración entre el 061, el Centro de Emergencias 112 y la Guardia Civil a través del Greim. En 2023 se llevaron a cabo 353 intervenciones. En lo que llevamos de año ya se han realizado más de 100 rescates.

Una de las profesionales que trabaja en este campo es Mónica Gros, médico del 061, que revisa cada día que su equipo sanitario esté preparado para la próxima emergencia. 

Imprescindible también es su formación específica en rescates durante un año y medio. El paciente puede estar en un lugar de difícil acceso, como un barranco o una zona con desprendimientos. "Aunque te enfoques en la parte sanitaria de la actuación, tienes que saber progresar y no ser un estorbo en el rescate porque los guardias están muy bien preparados físicamente y nosotros tenemos que seguirles", explica. 

Con una simple llamada se pone en marcha el operativo, en el que también participa la unidad aérea y el Greim de la Guardia Civil. Son los tres pilares de esas actuaciones. "El equipo básico sería con dos especialistas en montaña, el médico y dos pilotos. En función de la complejidad del rescate puede ser necesario ir con más personal de montaña o con más material", apunta Jesús Roselló, piloto de la Unidad Aérea de Huesca. 

La complicidad, señala el teniente Bain Gutiérrez, jefe del Greim de Jaca, es esencial: "Solo con una mirada, igual que entre los especialistas, ya sabes lo que quiere el otro, lo que se necesita para que estemos en ese mismo punto con los sanitarios y con los pilotos".