La miel llevará en la etiqueta los países de procedencia y el porcentaje mezclado

Buena parte de la miel que se consume en España es importada, y en los supermercados es común ver botes en los que se ha mezclado miel de distintos países. A partir de ahora los consumidores podrán saber no solo de dónde procede, sino también en qué porcentaje se ha mezclado. Los países de la Unión Europea han llegado a un acuerdo para dar esa información en las etiquetas.

Se trata de una reivindicación histórica del sector, para que los consumidores sepan de dónde es la miel que compran. "Es una práctica comercial que se viene haciendo desde hace unos años. Lo permite el código aduanero de la Unión. Permite estas prácticas de envasar y mezclar mieles de países terceros", explica Pedro Loscertales, responsable de Apicultura de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG). 

Los pequeños apicultores destacan que esa es la única razón por la que hay botes a cuatro euros en las tiendas. Algunos contienen gran volumen de miel de países como China, que llega a España con un precio irrisorio y con una calidad cuestionable, avisan. "Debido a ese proceso de ultrafiltración le retiran parte del polen y, principalmente, se pierden todas las propiedades", añade Loscertales.

El sector celebra ahora que el consumidor tenga toda la información de lo que compra para que no le den gato por liebre.